Por qué es tan difícil sentirse orgulloso de uno mismo?

Es fácil decir que somos inteligentes, es fácil sentirnos bellos, es facil sentir que somos fuertes, es fácil sentirnos bien con lo que somos y, aunque cuesta un poco, es fácil vernos al espejo e identificar cosas que nos hacen felices. Pero mas allá de lo anterior, está sentirnos orgullosos de nosotros mismos.

 

Me he estrellado con esto, siento q no me doy el crédito que me gané. Y ¿cómo sé que no me lo doy? Porque cuando pienso en estos últimos seis meses me dan ganas de llorar al pensar en todo por lo que he pasado y me pongo a pensar en otra cosa antes que se me arme un nudo en la garganta.

 

He tenido conversaciones serias con Dios en las que le he dicho “hermano se da garra”, siento que mi vida  ha sido como una carrera de observación, he tenido que vivir tanto en tan poco tiempo, que a veces pienso que como que él goza con todo esto.

 

Antes de recibir comentarios de grupos cristianos en contra de lo que dije, o de Asopapás, que está en contra de todo lo que es bueno y bello en la vida. Tengo que aclarar que lo he pensado y solo eso, no he llegado a creerlo.

 

Volviendo a lo de sentirme orgulloso de mi, me cuesta, siento que quien ha hecho todo eso es alguien mas, no yo. Pienso en ¿cómo lo asumiría otra persona que lo viviera?. A veces me cuesta creer lo que estoy viviendo en la actualidad.

 

Cada vez como que las pruebas que me pone la vida son mas complicadas, y eso es bueno porque quiere decir que las anteriores ya las superé,  y he aprendido de cada una para aguantar la siguiente. ¿qué vendrá?  Espero que dejemos así y de ahora en adelante mis problemas sean no saber qué hacer con tanta felicidad o cómo poder contagiar de alegría a la gente que lo necesita sin ser un payaso.

 

Por el momento solo puedo decir que estoy orgulloso de ese man que ha aguantado tanto, que se ha reido, que ha hecho chistes de esto, el que creó un blog para hablar del tema desde su punto de vista, el que canta una canción cada mañana e intenta tener una sonrisa todo el tiempo, el que ha aprendido a verle el lado bueno a todo, el que ha aprendido a gozarse hasta una cortada de uñas. Estoy orgulloso de él, pero me cuesta creer que ese él soy yo.